Para muchas personas, la idea de una cirugía para el prolapso de órganos da miedo. Es una gran decisión que requiere una cuidadosa consideración entre el paciente y el médico. Ambas partes deben sopesar todos los factores y posibilidades para decidir cuál es el mejor paso a dar.
Para tratar el prolapso de órganos pélvicos, existen dos tipos de cirugías que los médicos pueden sugerir: cerrar parte o toda la vagina (obliterante) o reparar el piso pélvico o la colocación de órganos (reconstructiva). Factores como la edad, los planes familiares futuros y las condiciones de salud actuales pueden ayudar a determinar qué cirugía es más adecuada o si someterse a una cirugía es siquiera una opción.
La cirugía de malla transvaginal es otro tipo de cirugía para aliviar el prolapso de órganos pélvicos. La malla se usa para reforzar la pared vaginal entre los órganos prolapsados abriendo la vagina con incisiones e insertando una hoja de malla. Sin embargo, existen muchas complicaciones que pueden surgir después de esta cirugía, como erosión, extrusión de la malla, perforación, infección, sangrado, dolor durante el coito y problemas urinarios. En abril de 2019, la FDA ordenó a los fabricantes de mallas vaginales que detuvieran su distribución. La razón de esto es que la malla vaginal no demuestra suficiente efectividad y seguridad. Aprende más Aquí.
Dado que el prolapso de órganos pélvicos no es una afección potencialmente mortal, puede ser conveniente para usted buscar otras opciones antes de decidirse por la cirugía. Para ayudarlo a comprender mejor, echemos un vistazo a las ventajas y desventajas de la cirugía de prolapso.
Las ventajas de la cirugía de prolapso
Colocación mejorada de los órganos pélvicos - Someterse a una cirugía mejora significativamente la colocación de los órganos pélvicos, lo que resulta en la eliminación de los síntomas causados por el prolapso de órganos pélvicos.
Sin necesidad de pesario - La cirugía de prolapso de órganos pélvicos obliterante y reconstructiva elimina la necesidad de pesarios de anillo. Un pesario es un dispositivo médico que se inserta en la vagina para evitar que los órganos se hundan más.
Los contras de la cirugía de prolapso
Alto riesgo - Cada cirugía conlleva su propio conjunto de riesgos sin importar la tasa de éxito de la cirugía o las habilidades del cirujano. Las cirugías de prolapso de órganos pélvicos conllevan altos riesgos, que incluyen complicaciones quirúrgicas como infecciones o sangrado. Más problemas, como dolor pélvico o incontinencia urinaria, también pueden ser causados por la cirugía. Por último, someterse a una cirugía no garantiza la eficacia a largo plazo.
Largo tiempo de recuperación - El hecho de que la cirugía del prolapso haya sido un éxito no significa que ya no sentirá dolor ni malestar. Someterse a una cirugía requiere hospitalización y puede llevar varias semanas recuperarse por completo.
Alto costo - La cirugía no es barata; puede costar desde $ 6,000 hasta $ 9,000, sin incluir los honorarios adicionales por citas médicas o por hospitalización. No todas las mujeres tienen la libertad financiera para pagar el precio de la cirugía.
Pérdida de la función sexual con cirugía obliterativa - La mayoría de los pacientes que se someten a cirugía obliterante son mujeres que ya no desean conservar su función sexual ya que requiere el cierre de toda o parte de la vagina. Esto también significa que las mujeres que deseen tener hijos en el futuro no querrán esta cirugía.
La solución no quirúrgica
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